Todos nosotros hemos pasados por momentos no íntegros como esperar por horas en una llamada de atención al cliente. Hemos aceptados productos que tardaron en llegar cuando juramos devolverlos por la tardanza. También sabemos que las personas que nos prometen llamarnos después de una entrevista de trabajo, casi nunca lo harán. En lo contrario, nos sorprendemos cuando alguien hace lo que dijo que haría, nos contesta una persona y no una máquina, o cuando un negocio acepta los retornos así hayan pasado mucho tiempo. La diferencia está en la integridad que hará de ti y de tu negocio en una empresa confiable, seria y que mantiene su palabra.

¿Qué Exactamente Es La Integridad?

La integridad es ser fiel a tus palabras, principios y actos en todo lo que tu hagas. Además de ser impecable con tu palabra, hablar de integridad es decir solo lo que tengas que decir. No prometas nada que no puedas cumplir o no esté a tu alcance. Si tomaste dinero para adquirir algún servicio o producto, debes respaldarlo con todo lo que tienes. Incluso, poner todo de ti para valorar aquella transacción y que otros valoren tu accionar. Un líder debe dar el ejemplo de integridad a la hora de hablar para mantener ese ambiente de confianza en su equipo.

La Integridad Con Otros

Integridad no significa que harás todo lo que dijiste hacer. A veces los errores suceden o obstáculos aparecen. Sin embargo, integridad es hacer todo lo posible por finalizar lo que te habías propuesto. Tener integridad también es poder explicar y renegociar cuando las cosas no resultaron como esperabas. Ten en cuenta que satisfacer a todo el mundo es un grave error, ya que solo te abrumará de tareas que quizás no puedas cumplir. Las lideres que carecen de integridad son los que fácilmente nos confunden con sus explicaciones. Ellos son los que dudemos de sus intenciones y nos dan un sentimiento de desconfianza.

La Integridad Contigo Mismo

La integridad con nosotros mismos es tan importante como con otros. Si haz hecho resoluciones por año nuevo, comprométete a cumplirlas. Estas metas que nos encomendamos no duran mucho por la falta de integridad que tenemos con nosotros mismos. Si prometiste bajar de peso o cambiar algún hábito, hazlo para empezar a tener integridad en tu vida. Verás como poco a poco, esta característica te hará un mejor líder para otros y para ti mismo. Ten en mente que cuando fallamos, tenemos menos fe en nuestra palabra y mucho menos en nosotros mismos. Si no creemos en nosotros, toda relación con otros se ve afectada.

Cuando uno aprende a vivir con integridad, pronto se dará cuenta del poder de la palabra. Aprenderás a medir tus palabras y a no darla tan seguido. Sin embargo, cuando otorgues tus sabias palabras habrá poder y magia. Esto hará que las personas vean en ti un mejor líder. La gente confiará en que tus decisiones son las correctas. Ten en mente que las personas buscan hacer negocios con una persona que mantiene su palabra.

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